CAPITULO V
EL ALUMNO ESPIRITUAL DE LOS SABIOS
Eran las ocho de la tarde y John quería saber, que extraordinaria había sido la vida de Julián, es casiimposible que alguien cambie tanto como lo hizo el, John quería saber si los conocimientos de Julián eran posibles de aprender, no le sentaría nada mal volver a sentirse joven y bien con el mismo, Julián acelero el ritmo de su relato al ver a John tan fascinado por su odisea y con ansias de aprender el método de la vida que los sabios le habían enseñado.
Julián vivía bajo la tutela del yogui Raman un sabio que se convirtió más en su padre que en su maestro, Julián aprendió todas las disciplinas de una vida más feliz a veces descansaba con una meditación y paseaba a los alrededores llenos de vida aprendió a fijarse en la belleza de las cosas más comunes, una noche estrellada, se volvió más alegre y su vitalidad física y su fortaleza espiritual su cuerpo se volvió delgado y fuerte, al terminar de decir esto Julián explico que tenía que irse, pero John le pidió que se quedara que le contara mas acerca de ese mundo pero Julián explico que todo era por pasos, todo a su tiempo, quedaron de verse al día siguiente en casa de John, Julián se despidió muy alegremente y John se quedo unos minutos en su despacho, no podía creer lo que estaba pasando, después de años sin ver a Julián se le apareciera de pronto y le contaba historias maravillosas, John salió del edificio hacia una calurosa noche de verano.
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